No. 453, Presentación de Los Conjurados

¡100.000 lectores semanales!


FUNDADORES: Gonzalo Márquez Cristo y Amparo Osorio. DIRECTORA: Amparo Osorio. COMITÉ EDITORIAL: Iván Beltrán Castillo, Fabio Jurado Valencia, Carlos Fajardo. CONFABULADORES: Fernando Maldonado, Gabriel Arturo Castro, Guillermo Bustamante Zamudio, Fabio Martínez,  Javier Osuna, Sergio Gama, Mauricio Díaz. EN EL EXTERIOR: Alfredo Fressia (Brasil); Armando Rodríguez Ballesteros, Osvaldo Sauma (Costa Rica). Antonio Correa, Iván Oñate (Ecuador); Rodolfo Häsler (España); Luis Rafael Gálvez, Martha Cecilia Rivera (Estados Unidos); Jorge Torres, Jorge Nájar, Efer Arocha (Francia); Marta L. Canfield, Gabriel Impaglione (Italia); Marco Antonio Campos, José Ángel Leyva (México); Renato Sandoval (Perú); Luis Bravo (Uruguay); Luis Alejandro Contreras, Benito Mieses, Adalber Salas (Venezuela);
Si desea cancelar esta suscripción gratuita por favor responda este mensaje a Con–Fabulación
con el asunto “Retiro”


PRESENTACIÓN DE LOS CONJURADOS





Común Presencia Editores en la Feria Internacional del Libro - Bogotá
Stand 133, Pabellón 3, Primer Piso

La Colección Los Conjurados ha publicado en sus diecisiete años de existencia 135 títulos en los géneros de poesía, cuento, novela, testimonio, ensayo, crónica y lúdicas y desde sus orígenes ha sido su propósito hermanar las artes plásticas con la literatura, y es así como nuestras publicaciones distribuidas en las capitales de cuatro países y en Amazon.com para todo el mundo, sean consideradas como pequeños objetos de arte.
En un tiempo que ha estandarizado la imaginación convirtiéndola en un producto domeñado, donde las ficciones obedecen a una estructura comercial insalvable, el espíritu de Los Conjurados y de nuestro periódico Con-Fabulación (que hoy llega semanalmente a 100 mil suscriptores) se eleva como una opción esencial para que el pensamiento y la diversidad que enriquece a la literatura encuentre su destino, es decir al lector, que a pesar de la narcosis planetaria aún conserva intactos los interrogantes de su existencia, pues recuerda la luminosa sentencia del Cacique Pielroja cuando advirtió en su famosa carta al presidente de los Estados Unidos: “Aquí termina la vida y comienza la supervivencia”.
Para esos lectores que nadan a contracorriente en sus ríos metafísicos, hoy bautizaremos nuestras novedades editoriales.

Presentación de las novedades editoriales.
Gran Salón de Ecopetrol (Múltiple 21, 22, 23 -Salón F)
Lunes 1º de mayo a las 11 am.

No me entierres en la nieve




Boris Julián Pinto. Médico cirujano, bioeticista, especialista en Creación Narrativa de la Universidad Central, profesor e investigador en el campo de la bioética clínica y profesor invitado al programa de maestría en Creación Literaria de la Universidad Central. Autor de varios trabajos académicos publicados en libros y revistas nacionales e internacionales. Su cuento Fabulista (1991) obtuvo el tercer lugar en el «Concurso de Cuento de la Revista Rapsodia» de la Universidad Nacional de Colombia. El libro Selah, o el masquil de amores fue finalista en el «Premio Nacional de Poesía Ciudad de Bogotá», convocado por el Ministerio de Cultura (2005). Barcas de Libertad fue finalista en el «Concurso Internacional de Ensayo Caminos de la Libertad» (2011). No me entierres en la nieve fue finalista en el «II Premio Nacional de Cuento» convocado por la Fundación La Cueva (2012). No me entierres en la nieve y otros relatos es su primer libro de cuentos.

“Llegó precedida por el olor de las azucenas. Entró como una reina en su litera tapizada con pieles manchadas de tejones, flotando sobre los hombros de seis eunucos sudorosos. Los ha­bitantes del cementerio blanco fueron los primeros en saludar el séquito real de enanos sonrientes, funámbulos, volatineros, encantadores de flautas, buhoneros de largos sombreros, bebe­dores de serpientes y domadores de cuervos. Detrás, llegaron los vivos a recibir la visita inesperada de tan lejanas tierras que avanzaba en medio del polvo, los azotes de los cueros de las tamboras, la mirada enajenada de los niños descalzos y la corre­ría de sus madres, lavanderas, molineras, pilanderas que sabían descamar el pescado y componerlo en salmuera”…

(Libro ilustrado por Gloria Ávila Pinto)

* * *

Sacrificio



Julio López,  nació en Duitama-Boyacá  en 1985. Es licenciado en Filosofía, Magister en Estudios y Gestión para el Desarrollo y especialista en políticas públicas. Reside actualmente en la. Publicó su primer libro Wittgenstein: la estética y el problema de la expresión en el 2012.

“Una mujer en la iglesia deposita una moneda dentro de la bolsa de las limosnas tratando de descubrir un camino de liberación, obstaculizada por el momento, el tintineo de las monedas dentro de la bolsa de terciopelo contrajo un pensa­miento irreducible al práctico problema de la simple teodicea.
—En el nombre del padre, del hijo, del espíritu santo, amén —Dice el sacerdote al persignarse y dar fin a la misa de noche”...

(Libro ilustrado por Francis Bacon)

* * *
Lúdicas



Argemiro Pulido Rodríguez.  Santa Cruz de Motavita –Boyacá 1953. A través de su trabajo como docente se ha dedicado a la promoción de la lectura y escritura con estudiantes y docentes. Es autor de: Lectura, escritura y autonomía, y del proyecto “Leer y escribir para comprender y transformar”. Premio Mejor PILEO de la SED Bogotá 2007. Su trabajo poético está condensado en los libros Desde Esta esquina, Poemas de Luz y sombra y Contraespejo. Actualmente se desempeña como docente de la SED Bogotá. Además, forma parte de la Academia Boyacense de la Lengua.

“Cada uno de los textos que conforman este libro, más allá de los refe­rentes que puedan contener, buscan ser un modo de acercamiento a la palabra que dejamos de lado, mientras pasamos raudos por las rutas circulares de la cotidianidad. A esa palabra, que de una parte nos constituye, y nos permite transformarnos y transformar nuestro mundo; y de otra, nos alienta y nos da los condimentos que necesitamos para vivir”...

NO DESEO QUE MI DESEO
sea tu deseo,
ni que tu deseo
sea mi deseo;
sólo deseo que tu deseo
y mi deseo
siempre se deseen.

EL HACEDOR
hace lo que hace
porque le nace,
sin condición;
el deshacedor
hace y deshace
lo que le place,
sin corazón.
¿DE QUIÉN ES LA ESTRELLA
que llama y destella?
—La estrella es de ella.
—¿Pero quién es ella?
—Ella es la doncella
que admira la estrella.

AL KÍNDER VA EL KOALA,
al kínder va;
vestido con kimono,
al kínder va.
Va con su tío koalote,
viajan en kart;
lleva kumis de kiwi
y kepis de kraft;
al kínder va el koala,
al kínder va.

(Libro ilustrado por Eduardo Esparza)

* * *
Jardín de piedras




Rocío Cabanzo de Ponce de León. Psicóloga clínica, se formó como Analista de Pareja y Familia. Es miembro activo de la Asociación Internacional de Psicoanálisis de Pareja y Familia. Publicaciones suyas sobre Psicoanálisis Vincular han aparecido en el Libro Pensamiento en el campo vincular. AAPPG, Buenos Aires, 2004. Revista Psicoanálisis de las Configuraciones Vinculares, Buenos Aires 2010. En la Revista Vínculo, San Pablo, Brasil. 2015 y 2016.  Obtuvo Mención Honorífica en el Concurso Nacional Casa Poesía Silva 2010 y es autora de los libros de poesía: Umbral de lo indecible (Apidama 2008), Turbia Sangre: Bogotá, (Común Presencia 2014). Es coautora de Trabajos de Taller 2001 y Poesía Pintada, 2009 (Casa de Poesía Silva).

INVICTO

Se salvó del abismo
prendido a una flor…
Y de su noche,
lamiendo la luz en los rincones.

GIROS

Eres humo
en el aleteo de tus pies.

Como una madeja
te desatas en  giros…

Ellos  son los ojos
de tu danza.

HAIKÚS

La copa toca
la jarra de cristal
y la quiebra.

***
Las olas lamen,
sin borrarlas, a la garza
su reflejo y su sombra.

***

Cómo juegan
sobre las piedras blancas, 
la luz y las sombras.

(Libro ilustrado por Armando Villegas)

* * *

La caída interior




Amparo Osorio Bogotá 1951. Poeta, narradora y ensayista. Ejerce la Presidencia de la Fundación Literaria Común Presencia desde1989. Cofundadora de la Colección Internacional de Literatura Los Conjurados y actual directora del periódico virtual Con-fabulación. Ha publicado los libros: Huracanes de sueños (1983); Gota ebria (1987); Territorio de máscaras (1990); La casa leída (Antología de autores universales, 1996); Migración de la ceniza (1998); Omar Rayo, geometría iluminada (Entrevista, coautora, 2001); Antología esencial (2001); Memoria absuelta (2004); Estación profética (Antología personal, 2010); Oscura música (Antología, 2013) y la novela Itinerarios de la sangre (2014).

TATUAJE

            A mi hija, razón de vivir mi vida

Acudiremos a cada anunciación.
Al dictamen de las brújulas.
Al temblor de la herida
que todavía enseña
desdichas y rostros despojados.
Acudiremos a todas estas muertes equívocas.
Nacer será después
en otras derrotas
en otros desencuentros.
CÁLICE
           
            Yo estoy en donde estuve:
                entre los muros indecisos
                del mismo patio de palabras
                                   Octavio Paz

Mi memoria
Contaminada de espinas y de árboles lejanos.
La casa que nunca fue
La redondez de la fruta más triste
Iluminada por el misterioso
Corazón de la luna.
Mi memoria galopante
Como una anunciación intraducible
Todavía despierta húmeda
En las neblinas de la albahaca.

INVERNAL

            A Chali

Oscurecía en los ojos de los árboles.
Yo aspiré entre su aroma
los llantos ocultos
de la última tempestad.
Y nada pude hacer contra ese invierno
que me azotaba el rostro.
No hay lucidez para el olvido.
Tampoco hay esperanza.

HERMÉTICA

            A veces le cantaba a sus ojos…
                A sus cabellos
                                   Ingmar Bergman

Dos cuerpos que se juntan para el amor
van tejiendo el olvido.
Dos cuerpos que se juntan en el olvido
se consuelan.
Todo es posible, apenas
entre dos que se aman
y el Séptimo Sello.



(Libro ilustrado por Jim Amaral)

* * *

A 80 AÑOS DEL GENOCIDIO DE GUERNICA



Por Rodolfo Alonso *


            A metros de la Casa Rosada, junto a la estatua de Juan de Garay, Buenos Aires ostenta desde 1919 un retoño del más que secular Árbol de Guernica, emblema sagrado de las libertades vascas. Anterior incluso a la existencia de España como estado nación, a partir de Isabel y Fernando los reyes acostumbraban jurar bajo su sombra venerable respetar los fueros de Euzkadi.
            Acentuando su fuerte simbolismo, ese magnífico Roble sobrevivió, en medio de un hito legendario: la guerra civil española (1936-1939), a otro hecho de trágica resonancia. El 26 de abril de 1937 la vieja villa de Guernica fue literalmente reducida a polvo, junto con buena parte de su población, por los flamantes aviones nazis de la Legión Cóndor.
            Porque el 18 de julio de 1936, militares conducidos por Francisco Franco se sublevan contra la legítima República española. Controlados y muchas veces vencidos por el pueblo en armas, los milicianos recuperaron en Madrid su principal reducto, el Cuartel de la Montaña. Así comenzó la última guerra de hombres, y la primera contra el fascismo. Contra los fascismos, que reaccionaron de inmediato.
            Del principio al fin, Hitler y Mussolini cooperaron con la rebelión enviando sus mejores tropas y modernos adelantos bélicos, decisivos para la victoria franquista. Goering probó allí su naciente Luftwafe, y más de 700 pilotos alemanes cuidadosamente elegidos volaron para Franco. Ensayaron bombardeo de ciudades, blitzkrieg o guerra relámpago, terror sobre poblaciones civiles, ataques aéreos en picada y táctica de apoyo directo a las tropas de tierra. Sin olvidar los tristemente célebres tanques Panzer I.
Esas crueles experiencias fueron invalorables, al estallar casi de inmediato la segundo guerra mundial (1939-1945), para los primeros éxitos nazis en toda Europa. La misma Europa que abandonó a los republicanos españoles. Que sólo contaron con la ayuda sobre todo inicial de la URSS y el apoyo permanente del México de Lázaro Cárdenas, sin olvidar las heroicas e indomables Brigadas Internacionales.
            El 23 de abril de 1937, el jefe de la Legión Cóndor, Wolfram von Richthoffen, primo del famoso as de la aviación alemana en la primera guerra, anota en su diario: “¿Qué se puede hacer? La Legión Cóndor se retira. No se puede dirigir a una infantería incapaz de atacar posiciones débiles.” Y al día siguiente: “¿Conseguiremos destruir Bilbao?”.
            El 26 de abril, a las 14,30 la campana mayor de Guernica repicó alertando sobre un ataque aéreo. Era día de mercado. Se corrió a los sótanos. Un solitario bombardero Heinkel 111 de la Legión Cóndor arrojó su carga letal en el centro y desapareció. La gente dejó sus refugios para socorrer heridos. Quince minutos después, la escuadrilla completa de la élite aérea nazi sobrevuela Guernica. Cierto número de cazas italianos Fiat CR-32 y Fiat-Ansaldo participaron también. Hubo una estampida para huir al campo, pero cazas Heinkel 51 ametrallaron sin piedad hombres, mujeres, niños. Sin embargo, faltaba lo peor.
            A las 17,15 cuarenta bombarderos Junker 52 arrasan minuciosamente la ciudad, en pasadas de 20 minutos durante dos horas y media. Arrojaron desde bombas medianas o pequeñas hasta de 250 kg, antipersonal e incendiarias. Los testigos describen escenas apocalípticas. Familias enterradas por escombros de sus casas o aplastadas en refugios. Vacas y ovejas ardiendo por la termita y el fósforo blanco, enloquecidas hasta morir entre ruinas en llamas. Salvo la Casa de Juntas y el Roble milenario, no alcanzados por hallarse fuera del corredor aéreo que los pilotos alemanes siguieron disciplinadamente, Guernica era una pira de fuego, humo y terror.
            El gobierno vasco sostuvo que un tercio de la población (1645 muertos y 889 heridos) sufrió en carne propia el bombardeo. Al día siguiente, 27 de abril, la prensa británica anuncia la destrucción de Guernica, y el 28 tanto el “Times” como el “New York Times” publican el célebre artículo de George L. Steer. La indignación mundial es inmensa e inmediata. El 29 de abril el cuartel general de Franco emite un comunicado, donde intenta adjudicar la responsabilidad a “las hordas rojas al servicio del perverso criminal Aguirre”, presidente de Euzkadi.
            La mayoría de los vascos eran católicos y moderados o conservadores. Se unieron al Frente Popular en defensa de sus fueros seculares. A diferencia de la Iglesia española, que apoyó vivamente la “Cruzada”, fueron acompañados por sus sacerdotes. Yo mismo recuerdo una foto en la cárcel franquista, donde cien curas vascos rodean al dirigente socialista Julián Besteiro.
            Sólo tras morir Franco (1975), como exigió su autor, el cuadro más renombrado de Picasso, pintado frenéticamente entre mayo y junio de 1937, pudo exhibirse en España. Quizá no todos quienes acuden al Museo Reina Sofía saben, hoy, a qué alude su sobrio título: “Guenica”. Durante la ocupación de Francia, al preguntarle ante la misma obra un oficial nazi: “¿Usted hizo esto?”, Picasso contestó simplemente: “No, esto lo hicieron ustedes.”
            Como prueba, baste lo declarado por Goering en el juicio de Nuremberg (1945-1946) a criminales de guerra nazis: “Cuando estalló en España la guerra civil, Franco pidió auxilio a Alemania, y en especial apoyo aéreo. El Führer vacilaba, y yo le aconsejé con energía que bajo cualquier circunstancia otorgase ese apoyo: en primer lugar, para impedir la extensión del comunismo en esa zona, pero también para poner a prueba mis nacientes Fuerzas Aéreas en una serie de detalles técnicos. Con autorización del Führer envié gran parte de nuestra flota de transporte y numerosos cazas y bombarderos, así como cañones antiaéreos. Pude comprobar en condiciones de combate si el material era eficiente. Para que el personal adquiriese además experiencia práctica organicé una rotación continua mandando constantemente unidades nuevas y repatriando las anteriores.”
            Esa fría pero precisa enumeración, de por sí escalofriante, se hace estremecedora si la contraponemos con las imágenes concretas y a la vez inimaginables del horroroso genocidio sufrido por Guernica. Nadie lo rozó tan hondamente como un íntimo amigo de Picasso, el gran poeta francés Paul Éluard, en su indeleble poema “La victoria de Guernica”: “Os han hecho pagar el pan / El cielo la tierra el agua el sueño / Y la miseria / De vuestra vida ///  Las mujeres los niños tienen igual tesoro / En los ojos / Todos muestran su sangre // El miedo y el coraje de vivir y de morir / La muerte tan difícil y tan fácil // Parias la muerte la tierra y la fealdad / De nuestros enemigos tienen el color / Monótono de nuestra noche / Daremos cuenta de ellos.”


* Poeta, traductor y ensayista argentino