No. 521, Luto en el arte colombiano

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Descripción: ConfabulaCabezoteActual

FUNDADORES: Gonzalo Márquez Cristo y Amparo Osorio. DIRECTORA: Amparo Osorio. COMITÉ EDITORIAL: Iván Beltrán Castillo, Fabio Jurado Valencia, Marco Antonio Garzón, Jairo Alberto López, Carlos Fajardo. CONFABULADORES: Fernando Maldonado, Gabriel Arturo Castro, Guillermo Bustamante Zamudio, Fabio Martínez, Javier Osuna, Sergio Gama, Mauricio Díaz. EN EL EXTERIOR: Alfredo Fressia (Brasil); Armando Rodríguez Ballesteros, Osvaldo Sauma (Costa Rica). Antonio Correa, Iván Oñate (Ecuador); Rodolfo Häsler (España); Luis Rafael Gálvez, Martha Cecilia Rivera (Estados Unidos); Jorge Torres, Jorge Nájar, Efer Arocha (Francia); Marta L. Canfield, Gabriel Impaglione (Italia); Marco Antonio Campos, José Ángel Leyva (México); Renato Sandoval (Perú); Luis Bravo (Uruguay); Luis Alejandro Contreras, Benito Mieses, Adalber Salas (Venezuela);
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LUTO EN EL ARTE COLOMBIANO  ADRIANA GÓMEZ


Descripción: AGomez-Violación. 2013. Mixta-lienzo  Descripción: IMG-20190825-WA0013

El pasado sábado 24 de agosto falleció la  pintora bogotana Adriana Gómez. Sus exequias tendrán lugar el 27de Agosto a las 2.30 pm., en la Iglesia de Cristo Rey (Calle 98 No. 18-23)

Al hacer llegar a sus familiares y amigos nuestra voz de solidaridad, compartimos la entrevista a la pintora realizada en el 2013 por el poeta Carlos Fajardo Fajardo, video que hace parte de la serie “Vida y obra de artistas”, producida por Le Monde Diplomatique y Ediciones Desde Abajo.

Carlos Fajardo Fajardo
En la obra de Adriana Gómez (1955-2019) un imaginario urbano poético se hace presente. La iconografía de la ciudad, con sus luces y sombras, junto a la masificación sintetizada en colores vivos y en espacios geométricos por donde divagan los elementos de una viva cotidianidad,, son registrados con una sensibilidad que se debate entre el alegre festín con el mundo y el distanciamiento desgarrado del mismo.
En las series denominadas “guardarropa” y  “¿qué me pongo?”, por ejemplo, lo íntimo se sintetiza en el vestido personal, proyectando un cierto costurero poético de lo cotidiano, a veces apacible, otras, desgarrado. He allí el juego imaginativo de sus contrastes: un vestier femenino se vuelve protagonista central, simbolizando la imagen y la reinvención del tiempo y de la memoria. Siempre una pregunta sobre el existir, un interrogante sin respuesta, el eterno divagar hacia lo desconocido, la constante búsqueda de algo en medio de grandes incertidumbres.
La magia y lo maravilloso las encuentra Adriana Gómez en las cosas: semáforos, ruedas, carros, maletas, vestidos femeninos, escaleras, baldes, brochas, son objetos que se sostienen del hilo del sueño y de la imaginación, grávidos y leves a la vez, terrígenos y espirituales como son los juegos de la infancia, como es la poesía que en ella palpita. .
Al lado de esta dimensión urbana, construida de extrañezas y asombros, están aquellos seres perdidos y anónimos, sumergidos en una soledad en red sin salida. Son las multitudes de los sin rostro, que se debaten entre lo apacible del sueño y la dura conciencia de lo real.
Aquí la condición social sale a flote. Los hombres y mujeres desaparecidos existencial y políticamente, se hacen presentes con su dramático sino; las imágenes de las víctimas del conflicto, en un país que las ha ignorado sistemáticamente, brotan desde el fondo del abismo, surgen a la superficie con el color de la sangre y los brochazos de la conciencia.


MINIFICCIÓN*
TODO TIEMPO FUTURO FUE PEOR – RAUL BRASCA


Anoche se sobrepuso a las balas que lo acribillaron y huyó de la policía entre la multitud. Se escondió en la copa un árbol, se le rompió la rama y terminó ensartado en una verja de hierro. Se desprendió del hierro, se durmió en un basural y lo aprisionó una pala mecánica. La pala lo liberó, cayó sobre una cinta transportadora y lo aplastaron toneladas de basura. La cinta lo enfrentó a un horno, él no quiso entrar y empezó a retroceder: dejó la cinta y pasó a la pala, dejó la pala y fue al basural, dejó el basural y se ensartó en la verja, dejó la verja y se escondió en el árbol, dejó el árbol y buscó a la policía. Anoche puso el pecho a las balas que lo acribillaron y se derrumbó como cualquiera cuando lo llenan de plomo: completamente muerto.

*Tomado de ·”Antología inédita” de Guillermo Bustamante Zamudio

TRES POEMAS DE ARMANDO ROMERO

Descripción: armando romero
Armando Romero*


Palabra por palabra
Palabra por palabra
El hombre se levanta
A deshabitar el alma

Corre el riesgo de los vientos
Que curvan ventanas
Desnudas

Pero al atreverse con los dioses
Se sabe ágil
Ligero

Hay en su mirada
Mucho cielo
Mucha planta


Invocación a la lluvia

Dime si empieza a llover
Y una gota grande como un sol se desprende
Viniendo desde esa mano de cielo en líneas entrecruzadas
Al geranio de cristal plantado entre las maderas del patio.

Dime ¿Qué debo hacer?
¿Cuál es el salmo que abre esa llave?

Y no deteniéndose allí inaugura un cono de reflejos
Una paz de chorros en el vidrio y la ventana
Inicia la envidia de los vecinos
Con un tronco de piedra entre los dedos

Dime ¿Qué debo hacer?
¿Cuál es el evangelio que tumba esa puerta?

Y desmedida por la piel
Mientras olvida el marco natural
Invade nuestros cuerpos tendidos
En la digna postura del amor

Dime ¿Qué debo hacer?
¿Cuál es el verbo que derrama esa gota?


Al parecer de la huída
Huye de la ciudad que no se queda en las uñas;
de la ciudad que duerme sin ruido y esconde un cuchillo
debajo de la almohada;
corazón en blanco y negro como bandera al agite de los carros;
escapa de la belleza de sus días,
del terciopelo en las tardes;
dile al guardia que no han florecido los geranios
ni los tulipanes;
lanza tu risa de aguja fina por los callejones,
y huye, huye para huir
de la bocina sin aliento que aceita la máquina;
del polvo rucio que se pega a los zapatos;
del viento que pasea los semáforos;
tírate avenida abajo y arriba al pie de las locomotoras,
de las hélices, de la bencina.
Huye de la ciudad que hace llorar ojos
sin reír el alma.
Huye y huye hasta que huir sea sentido de recuerdo,
y allá, al borde de los desaguaderos,
espera que vuelva hacia ti,
para seguir huyendo.

Armando Romero (Cali, Colombia, 1944). Poeta, narrador, traductor, ensayista y profesor universitario. Perteneció al grupo inicial del nadaísmo en Cali. Entre sus libros de poesía figuran: Los móviles del suelo (1976); El poeta de vidrio (1976); Del aire a la mano (1983); Las combinaciones debidas (1989); A rienda suelta (1991); De noche el sol (2004); Cuatro líneas (2005; A vista del tiempo (Antología, 2005) y El árbol digital y otros poemas (2009). También ha publicado libros de cuentos, como El demonio y su mano (1975); La casa de los vespertilios (1982); La esquina del movimiento (1992); La raíz de las bestias (2005). Entre sus novelas destacan: Un día entre las cruces (1993); La piel por la piel (1997) y La rueda de Chicago (2004), Premio a la mejor novela de aventura, Latino Book Festival, New York, 2005. Ha sido distinguido con el título de Charles Phelps Taft Professor de la Universidad de Cincinnati. En el 2008 recibió el título de Doctor Honoris Causa de la Universidad de Atenas, Grecia.

METAPHYSICA


Las olas del corazón no estallarían en tan bellas espumas
ni se convertirían en espíritu
si no chocaran con el destino, esa vieja roca muda.

Friedrich Hölderlin

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CARTAS DE LOS LECTORES

CONFABULADOS: Exquisito ensayo del filósofo Germán Vargas Guillén. Gracias por la difusión de este tipo de materiales tan importantes, sobre todo para quienes residimos en la provincia. Carlos Arturo Penagos

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AMIGOS CONFABULADOS: Hace muchos años en un viaje a nuestro país, conocí al poeta Casimiro de Brito. Me alegra mucho hoy encontrarlo de nuevo en sus páginas. Patricia Morales

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QUERIDOS CONFABULADOS: Interesante pensamiento el del escritor Pablo Montoya sobre nuestra heroína Antonia Santos. Daniel Velásquez Cháux
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QUERIDOS CONFABULADOS: Profunda columna de su sección Metaphysica. Gracias. Anabel Martínez